Alquiler coche Nüburgring

Imarti Nürburgring Experience, Mayo 2022

El Ring nos volvía a regalar 3 días primaverales y especialmente soleados en los que pudimos compartir pista con cientos de aficionados de todos los rincones de Europa con los que disfrutamos de un fin de semana memorable.

Llegábamos a Nürburg el jueves por la tarde después de haber pasado el día en Bruselas, y las fotos, las maquetas a escala y los surtidores de gasolina antiguos que decoraban el hotel nos recordaban que ya estábamos en nuestro lugar favorito. Disneyland para mayores, como dice un buen amigo de México. Al entrar a la habitación nos daba la bienvenida un cabecero chulísimo con el Porsche 935, apodado "Moby Dick" por su peculiar alerón trasero que recuerda a una cola de ballena, con el que Porsche participó en las 24 Horas de Le Mans en 1978.

Luis Santiago - Porsche 935 Nürburgring
Porsche 911 Targa - Amanecer Nürburgring

El viernes madrugábamos, como de costumbre, para desayunar pronto y salir a dar un paseo para explorar la pequeña localidad de Honerath, a 12 km de Nürburg, donde estábamos alojados. Así que preparé la cámara, me la colgué al hombro y nos pusimos en ruta. En primavera el sol sale muy pronto en esta zona de Alemania y si hay suerte y no aparece la niebla, las vistas panorámicas son preciosas.

El circuito no abría al público hasta las 17:30, pero de camino al letrero rojo en el que pretendíamos hacernos una foto, nos cruzamos con el nuevo BMW M2 envuelto en su disfraz de camuflaje, así que decidimos acercarnos a la curva de Brünnchen a ver si con suerte lo veíamos rodando en pista. Cuando llegamos al aparcamiento grande que hay en la explanada vimos que ya había algo de público, así que sospechamos que algún coche especial tenía que estar rodando en pista.

Tras 10 minutos allí de pie esperando, de repente escuchamos el sonido, o más bien bramido, de un motor 6 cilindros Porsche a tope de vueltas que se acercaba a la zona en la que estábamos, y de pronto apareció ante nosotros una silueta muy especial que ninguno nos esperábamos... era el nuevo y espectacular Porsche 992 GT3 RS! Suerte que me dio tiempo a preparar la cámara y apuntar a la curva a derechas donde le pude pillar tirándose al vértice interior a una velocidad con la que con cualquier otro coche sería casi imposible entrar.

Por supuesto también vimos pasar al nuevo BMW M2, el cual tiene una pinta bastante buena, y también algunos modelos nuevos de Mercedes así como varios coches eléctricos también camuflados, tecnología que ya se empieza a ver cada vez con más frecuencia rodando en pista.

Juan Santiago - Desayuno hotel Nürburgring
Porsche 992 GT3 RS - Brünnchen - Nordschleife

A medida que avanzaba la mañana iban llegando más integrantes del grupo, quienes se unían a nosotros para disfrutar del espectáculo. A las 15:00 teníamos que estar en las instalaciones de RSR para recibir el imprescindible briefing de seguridad antes de entrar en pista, así que a las 13:00 nos subimos a los coches para ir a comer a Zur Nürburg. Me llevé un pequeño disgusto cuando abrí la nueva carta del restaurante y no encontré mi favorita, la Eiffel burger. No me lo podía creer! Yo no soy de rendirme a la primera, así que cuando el camarero se acercó a la mesa para tomarnos nota, le pregunté si sería posible pedirla. Me sugirió que esperase un momento que le iba a preguntar al chef, y cuando volvió de la cocina me confirmó con una gran sonrisa que podía contar con ella. Aquella buena noticia sonó en mi cabeza a música celestial ;)

Tras la comida nos tomamos un café rápido y nos fuimos a RSR, que está a solo 2 minutos de Zur Nürburg en coche. Allí nos esperaba Serxio, buen amigo y en gran medida culpable de que estemos allí una y otra vez, pues no es habitual encontrarse con gente de trato cercano y a la vez profesional como lo es él.

El briefing es de vital importancia, pues es el momento en el que los participantes son conscientes de la realidad a la que se van a enfrentar, ya que están a punto de ponerse al volante de coches bastante potentes para entrar a rodar en el trazado más largo y complicado del mundo. En él se explican las normas de seguridad que se deben seguir para disfrutar del circuito sin correr riesgos innecesarios y se explica a los conductores los peligros a los que se exponen si se saltan ciertas reglas. Tal es el baño de realidad que al finalizar el briefing algunos bromean incluso con volverse a España sin subir al coche, pero conscientes de que están a punto de cumplir uno de sus mayores sueños y con las pulsaciones a mil, irse de Nürburgring sin haber pilotado allí sería algo de lo que cualquiera se arrepentiría de por vida.

Y al bajar a la campa, donde estaban ya todos los coches preparados, arrancados y listos para entrar en pista, y faltando apenas 15 minutos para que abriesen el circuito, llega el momento de ponerse al volante para entrar en pista. Es entonces cuando mi hermano Luis y yo lanzamos la gran pregunta: ¿Quiénes se animan a entrar primero…? Se oyen muchas risas pero muy pocos levantan la mano, y es que cuando te ves tan cerca de dar tu primera vuelta al Ring, sientes una mezcla entre nervios, miedo y ganas de entrar que no es fácil de gestionar.

Finalmente salen los primeros voluntarios, así que formamos un convoy de 5 coches y nos dirigimos a la entrada del circuito donde por fin empieza la fiesta.

Honda Civic Type R - Renault Megane RS - Alquiler coche Nürburgring
Honda Civic Type R - Carrusel - Imarti Nürburgring Experience

Subidas, bajadas, peraltes, contraperaltes, pianos descomunales... El trazado alemán es un auténtico espectáculo. Aunque sus 21 km de longitud pueden parecer mucho, al llegar al final de la primera vuelta la mayoría de conductores coincide en que se les ha pasado en un suspiro, y es que la concentración, la descarga de adrenalina y las emociones son tan intensas que por un instante te olvidas de absolutamente todo.

A partir de esa primera vuelta ya no quieres parar, y estás deseando que alguno de los coches quede libre para volver a entrar en pista.

A las 19:30 cerraban el circuito y a las 20:15 teníamos reserva para cenar en el restaurante Pistenklause, a 5 minutos andando de las instalaciones de RSR, así que mientras algunos integrantes del grupo se acercaban un momento al hotel, el resto nos sentábamos a tomar algo fresco en la terraza, disfrutando de las joyas sobre ruedas que pasaban por allí mientras nos preparaban la mesa.

La cena en Pistenklause es el momento perfecto para conocernos todos un poco más y preparar la jornada del sábado en pista, donde muchos ya se animan incluso a montar en el asiento trasero durante las vueltas de otros participantes para ir aprendiéndose mejor el trazado.

El sábado a las 8:00 se abría de nuevo la pista, por lo que a esa hora ya estábamos todos allí preparados para pasarlo en grande. Las primeras horas son ideales para rodar puesto que el tráfico en pista es mucho menor y se rueda más tranquilo. Los más valientes ya se ponían a los mandos del Megane RS Trophy y del Civic Type R para ir subiendo el ritmo en pista, y mi hermano y yo empezábamos también nuestras vueltas con el Megane RSR Edition preparado para circuitos, en el que los participantes se suben con nosotros para disfrutar al máximo del trazado sin la "tensión" de ponerse a los mandos.

Renault Megane RS - Wippermann - Imarti Nürburgring Experience
Megane RS Trophy - Imarti

El día amanecía bastante soleado y como siempre que esto ocurre, a medida que avanzaba la mañana se iba llenando de más y más aficionados de todos los lugares de Europa que no querían perderse la jornada de pilotaje ideal. La estadística nunca falla, y es que cuantos más vehículos se juntan en pista la probabilidad de que ocurra algún incidente se dispara y así ocurrió. A lo largo de la mañana se produjeron varios accidentes sin grandes consecuencias, pero que forzaron el cierre de la pista de más de una hora para realizar tareas de limpieza y reemplazar varios tramos de guardarraíl, momento perfecto que aprovechamos para acercarnos a Paddock Shop para comprar algunos souvenirs como camisetas, tazas y las codiciadas pegatinas para poner en la parte trasera del coche.

A medio día improvisamos la comida y nos bajamos andando a Devil's Diner, el restaurante que hay en la misma entrada del circuito y que está a solo 10 minutos andando de RSR. Los días que hace bueno puedes comer en las mesas de fuera mientras contemplas los coches armados hasta los dientes que no paran de entrar y salir del circuito.

Nos sorprendió especialmente la cantidad de BMW E36 que vimos por allí, con lo difícil que es encontrar en el mercado una unidad en buen estado.

BMW M3 E36 Tracktool
Renault 5 GT Turbo - Nürburgring

Después de comer volvimos a entrar en pista y los participantes iban cogiendo cada vez más confianza y disfrutando mucho más del pilotaje. De hecho para algunos no solo era la primera vez en un circuito sino que además nunca habían practicado en él con el simulador, pero en la tercera vuelta ya se les veía tan sueltos que parecía que tenían años de experiencia.

Durante mis vueltas tuve la oportunidad de compartir pista con aparatos poco habituales por allí, como un Alpine A310 o un Renault Super 5 GT Turbo, modelo con el que mi hermano Luis y yo nos iniciamos en el mundo de los rallyes hace 20 años y con el que guardo una relación de amor-odio, pues corría como un sputnik pero tenía unos problemas de refrigeración tremendos que nos obligaban a abandonar por avería en muchas de las carreras.

Me sorprendió especialmente el comportamiento de los Toyota Yaris GR 4, que por su configuración y la tracción a las 4 ruedas lo convierten en el compacto perfecto para este trazado tan técnico y retorcido. En una de mis vueltas entré justo detrás de 2 de ellos y a pesar de que el Megane RS tiene algunos CV más, seguirles el ritmo en las zonas lentas y reviradas era misión imposible.

Después de una intensa jornada de pilotaje, el sábado a las 19:30 nos bajábamos de los coches para irnos a cenar al restaurante italiano Ventisette, situado en Adenau, lo que también se ha convertido ya en una tradición. Esta localidad es la más grande de la zona y la que más oferta de restauración ofrece, por lo que los aparcamientos están repletos de aparatazos y siempre hay muy buen ambiente.

Imarti Nürburgring Experience - Curva Brünnchen
Opel Kadett GT GR4 - Nordschleife

El domingo de 8:00 a 10:00 se celebraba en el circuito un meeting de coches clásicos que por supuesto no nos quisimos perder, así que nos fuimos de espectadores a la curva de Brünnchen para contemplar el espectáculo. Desde modelos míticos de Porsche como el 356 o el 550 Spyder, hasta los más laureados en los rallyes de los 70 y los 80, como los Opel Ascona, Manta y Kadett GT. A pesar de ser piezas únicas y con mucha historia, la mayoría de conductores no querían dejar pasar la oportunidad de disfrutarlos como es debido y me sorprendió gratamente la velocidad a la que pasaban por este sector del trazado.

A las 10:00 finalizaba el evento de clásicos y la pista abría de nuevo las barreras para el resto de conductores, así que nos subimos de nuevo a los coches para completar las vueltas que nos faltaban.

El domingo también hizo un día espectacular, lo que atrajo de nuevo a muchos aficionados. Lo que ocurre siempre en estos casos es que cuando hay muchos coches, se generan atascos en la recta del final para salir del circuito y esto es letal para los coches, especialmente los que tienen mecánicas apretadas, pues vienes de hacer 21 km con el motor a tope de vueltas y de repente tienes que parar en seco y ponerte a la cola, momento en el que los coches no reciben absolutamente nada de aire fresco y los motores se sobrecalientan. Tal es así que el motor de un Megane RS de un aficionado se prendió fuego estando parado en el atasco, y hubo que cerrar la pista para que los bomberos pudieran entrar a sofocar el incendio. Éste es para mí uno de los puntos débiles del circuito que se debe intentar solucionar, puesto que hay veces que la cola que se forma para salir es de tal magnitud que se llega a tardar hasta 25 minutos para recorrer los 200 metros que separan ese tramo de recta de la rotonda de salida.

A pesar de los múltiples cierres de pista que hubo a lo largo del fin de semana, el domingo por la mañana nos dio tiempo a todos a completar las vueltas que nos faltaban por dar y como es habitual, muchos de los participantes se animaron a dar algunas vueltas extra, e incluso en esta ocasión hubo 2 acompañantes que se también se animaron a entrar en pista para pilotar el Clio RS Trophy. Y es que una vez que estás allí, si te van las emociones fuertes no puedes dejar pasar la oportunidad de rodar en el circuito más deseado del planeta.

Renault Megane RS - Plantzgarten - Imarti Nürburgring Experience
Porsche 911 - Castillo Nürburgring

Y el domingo a medio día llegaba el momento de despedirse, con abrazos sinceros y la firme promesa de volver a vernos por allí, lo que en muchas ocasiones se cumple. Es alucinante como en solo 3 días puedes llegar a conectar de verdad con personas con la que compartes afición y esto es sin duda lo mejor que te llevas del viaje.

Algunos participantes aprovechaban para quedarse unos días más en Alemania y conocer un poco mejor la zona, otros ponían rumbo al aeropuerto para coger el avión de vuelta a España y otros nos poníamos en ruta con destino al circuito de Spa-Francorchamps, donde al día siguiente nos esperaba una divertida jornada de trackday.

¡Si te gustaría formar parte del próximo Imarti Nürburgring Experience, no te lo pienses más y ponte en contacto con nosotros a través de info@imartimotorsport.com o mediante llamada o Whatsapp en el 692 068 069!

Imarti Nürburgring Experience - Honda Civic Type R
Imarti Nürburgring Experience - Brünnchen - Evento Clásicos
BMW M3 E92 - Nordschleife
Hyundai i30 N - Imarti Nürbugring Experience
Opel Manta GT - Nordschleife
Porsche 992 GT3 - Nürburgring

Publicado el 08/06/2022 - Texto y fotografía: Juan Santiago Rubio